Las escaleras de emergencia para que puedan cumplir este rol, deben estar libres de todo obstáculo y en este punto, es una preocupación que este cuerpo de bomberos se viene manifestándose hace ya un tiempo sobre el uso indebido en casi todos los edificios.

Esta problemática pone en situación de vulnerabilidad no tan solo a quienes infringen la norma o el sentido común, sino a todos los ocupantes del edificio, tal es así qué, si un morador del primer piso ocupa espacios de circulación de la escalera de emergencia, automáticamente pone en situación de riego a los personas de los pisos superiores.

Otro de los usos y por el cual las escaleras de emergencias deben tener un mantenimiento adecuado y sin obstáculos, es al potencial ingreso del servicio de emergencias, (bomberos, Salud, policía) al edificio, situación está, que bomberos experimento en varias oportunidades con resultados malogrados.

Incluso este mal uso, ha llegado a puntos extremadamente peligros, dado que muchos usuarios han colgado ó modificado la estructura propia de la escalera de emergencia, tanto sea por peso al ser equipado por un asador (chulengo), cuchas de animales, muebles, cubiertas etc.

En tal sentido, no se debe nunca y bajo ninguna circunstancia, ni por error u omisión, considerar las escaleras de emergencias, como un apéndice de la vivienda.
Debemos entre todos cambiar civilizadamente estas conductas, entendiendo que estas acciones no ponen solamente en riesgo las vidas humanas de los moradores del edificio, sino también por ejemplo a los bomberos en su accionar.

Los consorcios, propietarios, inquilinos, etc., tiene una gran tarea del entendimiento, corrigiendo tan rápido como sean posible estas anomalias  y disminuir en consecuencia la vulnerabilidad de quienes habitan permanentemente o circunstancialmente el edificio.