La primera parte consistió en el ataque por parte del personal de la empresa con el uso de extintores portátiles auxiliando con una línea de seguridad y luego, personal del Cuartel procedió a aplicar las técnicas de control de gases incendiados bajo presión, que alcanzaron presiones de 12 Kg/cm2.

Al final del ejercicio se sacaron las conclusiones y se aclaró que en este tipo de incendio la prioridad es mantenerlo encendido y controlado hasta tanto se pueda cortar el suministro de combustible.