La Gripe A (H1N1) de 2009 es una pandemia causada por una variante del Influenza virus A de origen porcino (subtipo H1N1). Esta nueva cepa viral es conocida como gripe porcina (nombre dado inicialmente), gripe norteamericana (propuesto por la Organización Mundial de la Salud Animal) y nueva gripe (propuesto por la Unión Europea), nomenclaturas que han sido objeto de diversas controversias. El 30 de abril de 2009 la Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió denominarla Gripe A (H1N1).

 

El origen de la infección es una variante de la cepa H1N1, con material genético proveniente de una cepa aviaria, dos cepas porcinas y una humana que sufrió una mutación y dio un salto entre especies (o heterocontagio) de los cerdos a los humanos, y contagiándose de persona a persona. Según expertos (como el jefe del Departamento de Microbiología del Hospital Mount Sinai de Toronto, el doctor Donald Low), está por confirmarse la relación entre el virus de la gripe porcina H1N1 y el de los casos confirmados en México.

 

El 11 de junio de 2009 la Organización Mundial de la Salud (OMS) la clasificó como de nivel de alerta seis; es decir, pandemia actualmente en curso que involucra la aparición de brotes comunitarios (ocasionados localmente sin la presencia de una persona infectada proveniente de la región del brote inicial). Ese nivel de alerta no define la gravedad de la enfermedad producida por el virus, sino su extensión geográfica. La tasa de letalidad de la enfermedad que inicialmente fue alta, ha pasado a ser baja al iniciar los tratamientos antivirales a los que es sensible, sin embargo la futura evolución del virus es impredecible, como constata la directora general de la OMS Margaret Chan el 4 de mayo, ya que "Puede que en un mes este virus desaparezca, puede que se quede como está o puede que se agrave."

 

A fecha de 14 de junio de 2009 la gripe A (H1N1) se ha extendido por América, Europa Occidental, Extremo Oriente y Oceanía, con relativamente muy pocos casos en otras áreas del mundo. La tabla que sigue da cuenta del número de afectados y de la mortandad con respecto a los casos notificados. La explicación sería que antes del primer fallecido en México ya habría muchos afectados que habían pasado la gripe sin morir. Si se contasen esos casos entonces la mortalidad en México sería más baja que la calculada teniendo en cuenta sólo aquellos casos que se han podido detectar.Este argumento, quizá con menos fuerza, puede aplicarse a todos los países, de manera que la mortalidad real es siempre menor que la calculada a partir de los casos detectados.

 

Síntomas

 

Los síntomas de este virus nuevo de la influenza H1N1 en las personas son similares a los síntomas de la influenza o gripe estacional. Incluyen fiebre, tos, dolor de garganta, moqueo o secreción nasal, dolores en el cuerpo, dolor de cabeza, escalofríos, y fatiga. Una cantidad significativa de personas infectadas por este virus también ha informado tener vómito y diarrea. En este momento no se conocen los grupos de personas que corren un alto riesgo de contraer la nueva influenza A (H1N1), pero es posible que sean los mismos que sufren complicaciones por la influenza estacional. Las personas más propensas a sufrir complicaciones graves (debido a la influenza estacional) son personas de 65 años de edad (o más), los niños menores de 5 años, las mujeres embarazadas, las personas de cualquier edad con afecciones crónicas (como asma, diabetes o enfermedades cardiacas), las personas inmunodeprimidas (por ejemplo las que toman medicamentos inmunodepresores), y las infectadas por el VIH.

 

 

 

 

 

 

Fases pandémicas

 

  

Fases de alerta de pandemia según la OMS (2009)

 

Fase    Descripción

 

Fase 1            No hay entre los animales virus circulantes que hayan causado infecciones humanas.

 

Fase 2            Circulación entre los animales domésticos o salvajes de un virus gripal animal que ha causado infecciones humanas, por lo que se considera una posible amenaza de pandemia.

 

Fase 3            Existencia de un virus gripal animal o un virus reagrupado humano-animal que ha causado casos esporádicos o pequeños conglomerados de casos humanos, pero no ha ocasionado una transmisión de persona a persona suficiente para mantener brotes a nivel comunitario.

 

Fase 4            Transmisión comprobada de persona a persona de un virus animal o un virus reagrupado humano-animal capaz de causar "brotes a nivel comunitario".

 

Fase 5            Propagación del virus de persona a persona al menos en dos países de una región de la OMS.

 

Fase 6            Además de los criterios que definen la fase 5, hay acompañamiento de la aparición de brotes comunitarios en al menos un tercer país de una región distinta.

Periodo posterior al de máxima actividad     La intensidad de la pandemia en la mayoría de los países con una vigilancia adecuada habrá disminuido por debajo de la observada en el momento álgido.

 

Periodo pospandémico          Los casos de gripe habrán vuelto a ser comparables a los habituales de la gripe estacional. Es importante mantener la vigilancia y actualizar en consecuencia la preparación para una pandemia y los planes de respuesta.

 

 

Recomendaciones

 

 

Una de las medidas tomadas consistió en la elaboración, por parte de la Secretaría de Salud del gobierno mexicano, de la lista siguiente de recomendaciones para evitar la infección:

  • Mantenerse alejados de las personas que tengan una infección respiratoria.
  • No saludar de beso ni de mano (salvo que se trate de familiares y conocidos cercanos que no presenten los síntomas).
  • No tocarse la cara, en particular las zonas donde las mucosas están expuestas (los ojos, la boca, el interior de la nariz, el interior de las orejas).
  • No compartir alimentos, vasos ni cubiertos.
  • Ventilar y permitir la entrada de sol en la casa, en las oficinas y en todos los lugares cerrados.
  • Mantener limpias las cubiertas de cocina y baño, las manijas y los barandales, así como los juguetes, los teléfonos o los objetos de uso común.
  • En caso de presentar un cuadro de fiebre alta de manera repentina, o presentar, simultáneamente, los síntomas siguientes: tos, dolor de cabeza, dolor muscular y de articulaciones, acudir de inmediato al médico o a la unidad de salud más cercana.
  • Abrigarse y evitar cambios bruscos de temperatura.
  • Comer frutas y verduras ricas en vitamina A y en vitamina C (zanahoria, papaya, guayaba, naranja, mandarina, lima, limón y piña).
  • En caso de que no se tenga acceso a los alimentos mencionados, consumir suplementos alimenticios de vitamina C y vitamina D.
  • Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón (aunque el jabón no ejercerá ningún efecto químico sobre las partículas del virus, éstas se eliminarán de las manos por la acción física de frotarse las manos con agua y jabón).
  • En oficinas, call centers y cibercafés, limpiar teclados y ratones de las computadoras con alcohol para desinfectar y evitar una posible propagación del virus, sobre todo si han sido utilizados en las últimas horas o si las utilizan muchas personas durante el día.
  • Desinfectar cerraduras de puertas y pasamanos de lugares públicos con hipoclorito de sodio.
  • Evitar exposición a contaminantes ambientales.
  • No fumar en lugares cerrados ni cerca de niños, ancianos o enfermos

 

 

Fuente Wikipedia Enciclopedia